martes, 12 de diciembre de 2006

¿QUE INTEGRA UNA EMPRESA?

Muchas personas aspiran a tener su propia empresa, su propio negocio.
¿Por qué no lo logran?
El principal obstáculo es que la mayoría de las personas son hijas de empleados, no de empresarios.
Un empleado enseña a sus hijos a ser empleados al igual que un empresario enseña a sus hijos a ser empresarios.
Así que el primer paso para tener una empresa propia es cambiar de mentalidad.

La mentalidad de empleado
Otro aspecto importante es que el sistema educativo de la sociedad industrial todavía vigente prepara a las personas para ser empleados, no empresarios.
Las universidades fabrican empleados, pese a que no se aumenta el número de empleos cada año para recibir a los nuevos graduados. Más bien disminuyen los puestos de trabajo.
Hemos pasado de la sociedad industrial a la sociedad del conocimiento, pero las universidades siguen operando con los esquemas de la vieja sociedad industrial, preparando personal para los empleos y no preparando a nuevos empresarios para la producción.
Nos enseñan a trabajar para otros, a ser productivos para otros, a construir el sueño de otros y después no nos explicamos por qué son otros los que alcanzan resultados sobresalientes en sus vidas.

Los tres factores que integran una empresa
Es importante que sepamos qué se necesita para tener una empresa.
La mayoría de las personas se concentran en el dinero, pero tener dinero en la mayoría de las ocasiones lo que conduce es al despilfarro, la improvisación y el fracaso.
Los factores que integran una empresa son tres:
1. Suplidores
2. Procesadores
3. Clientes

Suplidores
Son aquellas personas y entidades que proporcionan los recursos básicos para que los procesadores (el negocio en sí) puedan brindar servicio a sus clientes.
Pueden ser suplidores de
materias primas (para ser transformadas),
servicios (luz, teléfono, etc.),
consumibles (productos de limpieza, café, azúcar, etc.),
personal (compañía que proporcionan empleados) o
productos terminados (para ser distribuidos)

Procesadores
Este es el negocio propiamente. Los procesadores añaden valor, es decir, modifican o mejoran de alguna manera, lo que reciben de sus suplidores para facilitarles a los clientes su adquisición y consumo.
Son procesadores porque su labor la realizan mediante un proceso, una serie de pasos que conducen a un resultado.
Dos ejemplos lo ilustran.
Una fábrica de refrescos adquiere concentrados (sirop), azúcar, agua, botellas, tapas, etiquetas, etc., las mezcla, envasa y distribuye a diversos comercios, que son sus distribuidores, para facilitarle a sus clientes su adquisición y consumo.
Un comercio, por otra parte, recibe de su suplidor, la fábrica de refrescos, las cajas de unidades que luego enfriará y detallará (esos son valores añadidos) a sus clientes, facilitándoles su adquisición y consumo.
En ambos casos vemos que han intervenido suplidores, se ha realizado un proceso y están los clientes que adquieren y consumen los productos y servicios.

Dos tipos de suplidores
Existen, como vemos, dos tipos de suplidores: los fabricantes y los distribuidores o comerciantes.
Para tener tu propia empresa lo primero es definir si quieres ser fabricante o prefieres ser distribuidor comerciante.

Los clientes
Estos son los consumidores en última instancia.